miércoles, diciembre 12, 2007

Aniversario

Leticia subió presurosa los escalones que conducían al primer piso del viejo edificio, que carecía de ascensor. Estaba contenta. Ese día celebraría con Jorge su primer año juntos. En su mano, una bolsa contenía unos congelados filetes que, en el microondas, se convertirían en una deliciosa cena en la que el salmón sería el plato principal, el preferido de su amado. Junto al pescado, una botella de champagne condensaba el vapor existente en el aire, dando claras señas de estar fría también. Hacía un poco más de un año que Martín, un amigo común, le había presentado a Jorge en el cumpleaños de aquél. Era un apuesto treintañero que dirigía una empresa de insumos informáticos, de buen ver y mejor vestir, con quien había comenzado a salir unos días después, tras intercambiar números telefónicos en el mismo cumpleaños y recibir de él un convite a una cena. Ella venía de una larga y penosa relación, donde finalmente fue dejada de lado por otra mujer, y él se reponía de un divorcio en el cual, felizmente, no había hijos de por medio. Se veían con regularidad, excepción hecha de los días viernes, que desde un principio Jorge la había aclarado, era su día para ir a jugar bowling con sus amigos, deporte en el que tenía cierta destreza, pero que a Lucía no le interesaba, por lo que nunca le acompañó, si bien tampoco le negó su derecho a continuar una vida propia. De todos modos, la semana tenía otros seis días para verse. Pero este viernes, ella le esperaría en el departamento de su amado, del que tenía una copia de la llave, con al cena lista y su amor ardiente, para festejar.

Al entrar en el espacioso living, notó extrañada que la luz del cuarto estaba prendida. Sin hacer ruidos, se asomó por la rendija que la puerta dejaba entre ésta y el marco, viendo sobre la cama, abrazados, amándose y desnudos, a Jorge y Martín, sin sospechar éstos que, sentada en una esquina de la habitación, reía a carcajadas la Muerte.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Andrés:
No sabía dónde poner este comentario...así que aquí va. Deseo para ti un espiritu navideño muy renovado, colmado de paz, felicidad en lo trascendente y amor, sobre todo amor.
Que el proximo año sea para ti año de crecimiento espiritual y alcances tu sueño más preciado.

Cariños de esta chilena que siempre pasa, aunque silenciosa...

Andrea Balbontin Nesvara

ElMago dijo...

Muchas gracias por los buenos deseos, Andrea. Es de esperarse que alguna de las cosas que uno desea se cumplan :P :P

Que pases un año espectacular en compañía de quienes quieres.

Y gracias, nuevamente, por venir a mirar siempre mis pobres aportes.